Monitoreo del Periodo Eruptivo
El IGEPN cuenta con una red permanente de estaciones sísmicas que permiten monitorizar los procesos volcánicos en Galápagos en tiempo real. Además, se tiene acceso a los datos de la red de cGPS administrada por UNAVCO y a los análisis de interferometría (InSAR), elaborados por la Escuela de Ciencias Marinas y Atmosféricas de la Universidad de Miami (RSMAS). Esta información es y fue complementada con datos satelitales durante el proceso eruptivo del volcán Sierra Negra. La evolución completa de los procesos de desgasificación de SO2 (gas volcánico) registrados por los satélites AURA/OMI y Suomi NPP/OMPS, las anomalías térmicas observados por MODIS y las imágenes en casi tiempo real del satélite GOES-16, sumados a los datos de las estaciones sísmicas nos permitieron monitorizar detalladamente la evolución del proceso eruptivo.
La figura 1 muestra el progresivo descenso en el número de sismos con amplitudes mayores a 290 um/s (magnitud aproximada 2.1) desde su pico máximo de 38 eventos registrados el 26 de junio hasta menos de tres eventos por día en la última semana.
La figura 2 muestra varios pulsos o etapas en donde la erupción fue más intensa (mayor tasa de extrusión de lavas). Estos fueron registrados tanto por las estaciones sísmicas como por las imágenes satelitales y reportados oportunamente en informes especiales anteriores Informe Especial Nº12, Informe Especial Nº13, Informe Especial Nº16 y Informe Especial Nº17. Los cinco pulsos más importantes ocurrieron el 1-2, 7-8 y 31 de Julio y el 4 y 9 de Agosto 2018 (barras verdes).
Estos pulsos de tremor se caracterizan por tener su mayor amplitud en la estación VCH1 (ver figura 4), situada en volcán Chico, que es la más cercana a la Fisura 4. La figura 3, muestra que el tremor tiene frecuencias entre 1 y 4 Hz, muy diferentes de las frecuencias asociadas a la actividad marina. El último pulso de tremor ocurrió el 9 de agosto (figura 2).
Observaciones Visuales y Actividad Superficial
Las imágenes satelitales de libre acceso de Sentinel-1 y 2 y Landsat-8 permitieron realizar un control continuo de las áreas afectadas por los flujos de lava durante la erupción del volcán Sierra Negra desde el inicio del periodo eruptivo. Se identificaron dos fases principales durante este periodo:
• La primera fase inició con la erupción (26 de Junio) y duró menos de un día. Esta fue la más intensa caracterizada por la emisión de flujos de lava por las fisuras 1, 2, 3, 4 y 5 (figura 4). Cubriendo un área mayor a 17 km2.
• La segunda fase duró 57 días y la actividad eruptiva estuvo concentrada en la fisura 4 (figura 4). Esta fisura emitió flujos de lava que cubrieron un área aproximada de 13 km2.
A continuación una actualización del Informe Especial Nº16 correspondiente a las áreas cubiertas por flujos de lavas emitidos en las diferentes fisuras. Cabe destacar que los valores aquí calculados y reportados en informes previos han ido fluctuando en función de la evolución del proceso eruptivo y la calidad de las imágenes satelitales utilizadas para dichas estimaciones.
• Fisura 1: es una apertura localizada al borde de la caldera (1070 msnm) en el sector de Volcán Chico (figura 4) alineada en dirección occidente – nor-occidente, tangencial al borde de la caldera. Tiene una longitud de cuatro kilómetros (4 km) y emitió flujos de lava desde el inicio de la erupción, hacia el interior y exterior de la caldera, cubriendo un área de 14.6 km2 , hasta el día 27 de junio en que aparentemente cesó su actividad. Los flujos depositados al exterior de la caldera tuvieron un alcance máximo de siete kilómetros (7 km) pendiente abajo, sin llegar al mar; mientras que los del interior de la misma alcanzaron una distancia máxima de 1.1 km (figura 4).
• Fisura 2: ubicada al nor-occidente de la caldera (figura 4), a unos tres kilómetros bajo del borde de la misma (700 msnm). Tienen aproximadamente unos 250 metros de longitud y produjo flujos de lava desde el inicio de la erupción, cubriendo un área de 2.2 km2 hasta el día 27 de junio cuando aparentemente terminó su actividad. Tuvo una extensión de unos 3 km y sus lavas no llegaron al mar (figura 4).
• Fisura 3: ubicada hacia el occidente de la caldera (figura 4), unos cuatro kilómetros abajo del borde de la misma (550 msnm). Esta fisura tiene aproximadamente 250 metros de longitud y estuvo activa desde el inicio de la erupción, emitiendo flujos de lava que cubrieron un área de unos 0,4 km2 hasta el día 27 de junio cuando aparentemente concluyó su actividad. Los flujos de lava tuvieron una extensión de unos 2 km y sus lavas no llegaron al mar (figura 4).
• Fisura 4: ha sido la más activa, y desde el inicio de la erupción ha estado continuamente emitiendo flujos de lava. Está ubicada en el flanco noroeste (100 msnm) entre 7 y 8 km pendiente abajo del borde de la caldera (figura 4). Hasta el 25 de agosto sus lavas han cubierto un área aproximada de 13,3 km2. El 6 de julio, los flujos de lava originados en esta fisura llegaron al océano y modificaron la línea de costa ecuatoriana. Hasta el 25 de agosto, el territorio ecuatoriano se incrementó en 1.5 km2.
• Fisura 5: (840 msnm) ubicada en el flanco occidental 1.5 km pendiente abajo del borde de la caldera (reportado por Marco Bagnardi). Esta tiene una longitud de 170 metros y cubrió 0.026 km2 de material volcánico (figura 4).
Hasta el 25 de Agosto se estimó un área cubierta por flujos de lava de aproximadamente 30,6 km2, área que es equivalente a la ocupada por la ciudad de Cuenca.
Interpretación
Debido al continuo descenso en los niveles de energía sísmica, llegando incluso a los valores previos al inicio del periodo eruptivo Junio - Agosto 2018 en el volcán Sierra Negra (ver figura 1 y 2a), y al decrecimiento en el número de alertas térmicas y niveles de desgasificación de SO2 el IGEPN informa la posible culminación del proceso eruptivo o la entrada a un periodo de calma, luego de 58 días de erupción.
Escenarios
De acuerdo a la información con la que se cuenta hasta el momento dos posibles escenarios son planteados:
• Fin del periodo eruptivo: siendo este el escenario más posible en función de los datos de monitoreo actuales.
• Periodo de calma y reinicio de la erupción: existe la posibilidad de que este periodo de calma no sea más que una pausa de la erupción, misma que puede ser retomada debido a un nuevo pulso profundo de magma. Este escenario ya se ha observado en erupciones anteriores en los volcanes de Galápagos como la sucedida en Mayo-Junio del 2015 en el volcán Wolf (norte de la isla Isabela) y en el mismo volcán Sierra Negra durante la erupción de 1979.
Conclusiones
La erupción del volcán Sierra Negra iniciada el 26 de junio de este año llega a un proceso de calma luego de 58 días de actividad.
La actividad eruptiva tuvo lugar a lo largo de cinco fisuras ubicadas en los flancos N y NW. Estas se caracterizaron por la emisión de flujos de lava que cubrieron un área total de 30,6 km2 . La emisión de flujos de lavas se distribuyó en dos fases:
1) la primera duró menos de un día y los flujos de lava emitidos por todas las fisuras (1, 2, 3, 4 y 5) cubrieron un área mayor a 17 km2 y,
2) la Segunda cuya emisión de flujos de lava duró 57 días y estuvo focalizada en la fisura 4 cubriendo un área aproximada de 13 km2. Los flujos de lava producto de esta fisura llegaron al mar el 6 de julio y modificaron la línea de costa de la isla incrementando el territorio en 1.5 km2.
Desde el inicio de la erupción del Sierra Negra la intensidad de la actividad eruptiva ha sido variable y se han reconocido al menos cinco pulsos donde la actividad se incrementó. Estos pulsos ocurrieron el 1-2, 7-8 y 31 de Julio y el 4 y 9 de Agosto 2018 y fueron reportados oportunamente por previos Informes Especiales.
El Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional se mantiene en comunicación permanente con las autoridades, informando sobre la evolución de este periodo eruptivo.
FJV, MR, PR, SH, AP
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional