1.- Situación Climática
Durante la visita realizada al volcán Tungurahua los días 16 y 17 de febrero del año en curso, las condiciones climáticas no fueron muy favorables. El volcán permaneció nublado la mayor parte del tiempo. El día jueves 16, se presentaron lluvias de fuerte intensidad en la zona alta, mismas que complicaron el ascenso hasta el refugio y a finales de la tarde no permitieron observar directamente al volcán; según el personal de turno en el Observatorio del Volcán Tungurahua (OVT), no se tuvieron reportes relacionados al descenso de lahares en ninguna de las quebradas del volcán.
El equipo técnico (Figura 1), estuvo conformado por vulcanólogos del Instituto Geofísico (Ecuador), vulcanólogos miembros del equipo “Trail by Fire” (Francia, Canadá y Portugal) y un guía de alta montaña. El ascenso comienza a las 2:30 am del día viernes 17. El volcán se encontraba nublado en la cumbre y totalmente cubierto de nieve hasta aproximadamente unos 500 metros bajo el nivel del cráter. El ascenso tuvo una duración aproximada de 4 horas hasta el cráter del volcán, a la llegada del equipo se pudo contar con una pequeña ventana de claridad que permitió en contados minutos realizar los trabajos en la zona. La temperatura ambiente fue de aproximadamente un grado centígrado bajo cero (- 1 °C), con una humedad relativa del 50%.
2.- Actividad Superficial
La actividad fumarólica se observó muy escasa y pulsátil, las fumarolas del flanco NW y N se presentaban como pequeños penachos de gas, posiblemente constituidos en mayor parte de vapor de agua. Dentro del cráter del volcán se observaron pequeños campos fumarólicos, mismos que presentaban una actividad muy baja y de los cuales apenas se lograba distinguir la salida de gases en muy poca cantidad; su altura no alcanzó a superar el borde del cráter (Figura 2).
No se pudo percibir olor a azufre en ningún tramo durante el ascenso, ni mientras se realizaban los trabajos en la zona alta del volcán (cráter).
Además, como parte del trabajo se lograron obtener nuevas medidas mediante la ayuda de un dispositivo que permite medir grandes distancias de forma remota (Telémetro). Las nuevas medidas realizadas fueron: diámetro del cráter actual (363 m), profundidad máxima del cráter (228 m) y diferencia de altura del borde noroccidental (61 m), respecto a la cota de los 4895 msnm. En esta ocasión no se observaron cráteres asociados a explosiones freáticas.
Los resultados de las mediciones también se pueden observar en los esquemas presentados en la Figura 3.
3.- Monitoreo Térmico
Mediante el análisis de las imágenes térmicas capturadas en el cráter del volcán se obtuvieron los siguientes valores de temperatura máxima aparente TMA:
1. Borde interno SW, TMA= 110,8 °C.
2. Fondo del cráter actual, TMA= 68, 6 °C.
3. Borde NW, TMA= 111 °C.
En otras zonas dentro del cráter que han mostrado anomalías termales, se han calculado valores de temperatura variables entre 35 °C y 50 °C.
En general, todas las temperaturas obtenidas en este trabajo se consideran como bajas y podrían estar relacionadas principalmente a actividad hidrotermal (Figura 4).
MA, DN, PR.
Instituto Geofísico
Escuela Politécnica Nacional