Como parte de las tareas de vigilancia volcánica que desempeña el Instituto de Investigación Multidisciplinario “Instituto Geofísico de la Escuela Politécnica Nacional (IG-EPN)” y dentro del marco de cooperación del Proyecto Fortalecimiento de la preparación ante desastres y la recuperación en zonas indígenas propensas al impacto de múltiples amenazas y riesgos (HIP Preparativos Sangay) financiado por la Oficina de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO) y ejecutado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), entre el 15 y 17 de diciembre de 2021, el Técnico del Instituto Geofísico, en coordinación con el equipo técnico del proyecto, el GAD Municipal del Cantón Guamote a través de la Unidad de Gestión de Riesgos y los GAD Parroquiales Rurales de Cebadas y Palmira, se realizó el mantenimiento y la instalación de nuevos puntos de muestreo de la red de cenizómetros ubicados en las comunidades al occidental del volcán Sangay, en la Provincia de Chimborazo (Fig. 1). El objetivo de la instalación de estos cenizómetros es conocer con más precisión la caída de ceniza del volcán Sangay y de esta forma alertar a la población, para que puedan estar preparadas ante eventos como la caída de ceniza y minimizar los efectos negativos sobre la salud y los medios de vida.
Desde mayo de 2019, el volcán Sangay presenta una actividad eruptiva catalogada como de nivel moderado a alto, con emisiones casi continuas de gases, ceniza, flujos de lava, corrientes piroclásticas y lahares. Los parámetros superficiales muestran una continua emisión de nubes y caídas de cenizas sobre las comunidades localizadas al occidente del volcán.